Rosario de la Veracruz es una impresionante ciudad donde poder pasar unos días de vacaciones en cualquier época del año. Te damos varias opciones para que visites la ciudad.
Rosario de la Veracruz
A tan sólo 300 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires, Argentina, se encuentra la segunda ciudad en importancia de este país Sudamericano, la Ciudad de Rosario, con una población cercana al millón de personas, sin contar al área suburbana.
Rosario se alza en los márgenes del Río Paraná, su puerto es uno de los más importantes del país, es núcleo de una de las aéreas agrícolas de mayor importancia. Es además, centro cultural, comercial y turístico de la región. Rosario es una ciudad que merece ser visitada, vale la pena conocerla, es una bella ciudad que va a sorprendernos con sus atractivos.
Atractivos
La Ciudad de Rosario de la Veracruz tiene los atractivos que toda gran ciudad debe tener: diversidad de teatros, cines, museos, el planetario, dos centros comerciales de gran importancia, bares, hoteles y restaurantes. La ciudad cuenta con buena oferta de pesca del día por lo que se recomienda degustar un buen plato pescado de las diferentes variedades, muchos de sus restaurantes ofrecen servicio buffet: bocadillos, pescado a la parilla, a la plancha o en diferentes guisos.
El Parque Independencia
En el momento de ser concebido, el Parque Independencia, se encontraba alejado de su población. Hoy con más de un siglo es uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad. Este parque tiene 120 hectáreas plantadas por la mano del hombre. En su superficie alberga tres museos: el Museo Municipal de la Ciudad, el Museo Municipal de Bellas Artes “Juan B. Castagnino” y el Museo Histórico Provincial “Dr. Julio Marc”. Cuenta además con juegos para niños, un lago donde podemos navegar a remo o en botes a pedal, varios clubes y un rosedal, dentro del parque se encuentra el estadio de futbol del Club Newell’s Old Boys, que junto con el Club Rosario Central son dos de los equipos de futbol más importantes del país.
Los márgenes del Paraná
Sin dudas que uno de los más lindos paseos es recorrer la rambla del Río Paraná, lo que se puede comparar en su belleza a un paseo por las ramblas de Catalunya, podemos encontrarnos con buena oferta de restaurantes, bares y paseos. Hacia el norte, próximo al puente que une Rosario con la Ciudad de Victoria (provincia de Entre Ríos), se encuentra el Paseo del Caminante, un mirador construido sobre pilotes a lo largo del río, paralelo a la barranca de ingreso al muelle de pesca.
La Ciudad de Rosario tiene también balnearios de río, en los que podemos disfrutar de un refrescante baño en la época veraniega. Cuando el tiempo lo permita, podemos disfrutar de una excursión en lancha e ir hasta la Isla de la Ensenada, donde además es posible acampar, sus calles, las más tranquilas de la ciudad, son ideales para recorrerlas en bicicleta. En nuestro paseo podemos conocer el Mercado de Pulgas en el Barrio Pichincha, centro de los anticuarios y mercado retro.
Rosario de la Veracruz, “Cuna de la Bandera”
En la Ciudad de Rosario, fue enarbolada por primera vez la bandera nacional. Hecho acontecido el 27 de febrero de 1827. En conmemoración de tan importante momento en la historia nacional, Rosario cuenta con el Monumento Histórico a la Bandera Nacional. Este importante monumento tiene una torre de 70 metros de altura que fue diseñada por los arquitectos Antonio Bustillo y Ángel Guido y está emplazado En el Parque Nacional de la Bandera, muy próximo a la costanera, tiene además, un mirador que se puede visitar y un importante museo: la Sala de Honor de las Banderas, que alberga a las banderas de todos los países americanos. En el monumento se enciende la llama homenaje al soldado desconocido.
Para conocer el Monumento en todo su esplendor el viajero puede optar por una visita guiada, así como también contemplar los momentos en los que la bandera se iza y se arría (a las 8:15 de la mañana y a las 18:00 respectivamente). Desde 2007, el Monumento cuenta además con una bellísima iluminación ornamental, por lo que se recomienda a los viajeros que no dejen de visitarlo por las noches: un espectáculo que merece ser visto.